Siempre me encuentro con la suerte...

Esta foto está hecha (como ya he explicado) con la cámara a la altura de mis rodillas, osea, sin mirar... Gracias a los retratos que hago con la G7 se calcular bastante bien el encuadre que me puede dar la focal que tengo en se momento. Con lo que no cuento es con la suerte. Que por "suerte" siempre me acompaña. Como en esta foto, que lo que era un saludo o un reclamo a un amigo lejano se convirtió gracias a la perspectiva en una comprobación de la temperatura del foco...